Para este pintxo he utilizado rojadas de panecillos tostados con pasas, pero serviría cualquier otro o incluso pan de molde. Encima he colocado una loncha fina de membrillo (en mi caso ha sido casero y con nueces, gracias al trabajo de mi madre, pero cualquier membrillo sirve, o incluso podéis sustituirlo por una rodaja de kiwi). Encima del membrillo colocamos una rodaja de queso de cabra en rulo.
Y ahora viene el toque especial. Hay que picar jamón muy finito y tostarlo unos segundos en el microondas a máxima potencia. Cuidado con no quemarlo. Se distribuye un poco del picadito por encima del queso y como remate colocamos una seta preparada a la plancha previamente con ajo y perejil picaditos.
Se puede comer frío pero a mí me gusta más si se hacen al momento las setas y el jamón y se sirven calentitos con el queso fundiéndose. Hummmm, ¡qué hambre me está entrando!
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