Se acaba el veranito. Comienzan a acortarse los días y hay un montón de tareas que hacer de cara al invierno. Me encantan estas fechas, llenas de actividades como el embotado de pimientos, de bonito, las mermeladas, los licores caseros...
Hoy era el turno de estos tomatitos cherrys.
Los cortamos por la mitad y llenamos el fondo de una bandeja de horno. Cubrimos con ajo rallado, orégano y un poco de aceite y dejamos a horno medio-bajo unas dos horas.
Pasado ese tiempo, sacamos la bandeja y dejamos enfriar.
Una vez fríos, rellenamos los botes de cristal, completamos el contenido con aceite de oliva, cerramos bien y cocemos al baño María unos 10 minutos para sellarlos bien.
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